Florifagia II – Cuento Corto.

Ésta es mi propuesta para el VadeReto de Julio cuyo tema gira en torno a una receta de cocina.

Ella tenía ya algo de tiempo dedicándose a sus cultivos de flores. Era este un pasatiempo que había llegado a su vida sin querer. En una ocasión una malva había irrumpido la aridez de su jardín trasero con su espectacular belleza y deliciosas variaciones de violeta. En vez de cortarla, decidió conservarla y cuidarla. Descubrió que mirarla le traía paz y sentía que algo de la belleza de la flor pasaba a su ser maltrecho. Buscando más bienestar, a la malva siguieron crisantemos, rosas, lilas… aprendió a cultivarlas y luego se sorprendió creando recetas con ellas como ingrediente principal, tenía la esperanza de que al ingerir tanta belleza ésta la saturara y la transformara por completo.

Desde su niñez no había sido más que un ser feo por dentro y por fuera, una criatura maldita. Sabía de sobra que toda hermosura es efímera y la del mundo vegetal lo es aún más que la humana. Con todo, algo había de cierto en su teoría, y la belleza le duraba unos cuantos días: su piel marchita rejuvenecía y se ponía suave y tersa como pétalos de flores. Despedía también un aroma peculiar según el tipo de flor que hubiera comido; por ejemplo, el olor a rosas la metía en problemas: el viejo Augusto, el jardinero del rumbo, se sentía atraído por los efluvios de rosa que percibía en el aire e intentaba saltar la enorme verja de la casona inflamado por el deseo de encontrarse con la fuente de aquel olor embriagador. Invariablemente, unos gritos horripilantes lo despertaban del embrujo.

—¡Largo, largo! ¿No sabe que esto es propiedad privada? ¡Fuera! —El pobre hombre se alejaba corriendo, no sin antes hacer la señal de la cruz.

Como siempre, el efecto de las flores no duraba mucho y toda ella se empezaba a marchitar. Era hora de alimentarse otra vez.

Trabajó mucho intentando cultivar flores cuya belleza perdurara durante más tiempo, en sus recetas mezcló variedades, pero todo fue en vano. Un día, en medio de la frustración decidió dejar a un lado las tiernas flores para comer espinas y malas hierbas: lirios, adelfas, belladonas. Mientras se alimentaba escuchó una risa diabólica que flotaba en el ambiente. Intentó parar, pero aquello se volvió compulsión y mientras más comía, una rigidez espantosa empezó a invadirla, filosas espinas la recubrieron de pies a cabeza y sintió sus adentros fibrosos y secos. Quiso gritar, mas de su boca no salió ya ni un sonido. Esta vez el efecto no duró tan solo unas horas, duró semanas y fue lo más parecido a una muerte lenta y cruel.

Cuando el envenenamiento pasó y volvió a su fealdad de costumbre, aquella que la había acompañado desde su nacimiento y que se había exacerbado con la edad; destruyó los cultivos tanto de flores como de malas hierbas y ya nunca intentó ninguna receta floral para transformarse en otra cosa. Simplemente, se quedó con ella misma.

AUTOR: Ana Laura Piera / Tigrilla

Este cuento lo publiqué hace unos años, cuando apenas había «revivido» mi blog, y no mucha gente lo leyó, pero me pareció que encajaba para el reto y como mi inspiración no anda en su mejor momento lo estoy re-publicando. Si te gustó tengo otro relato con el mismo tema, lo puedes encontrar aquí https://anapieraescritora.wordpress.com/2020/11/29/florifagia/

https://bloguers.net/votar/AnaPiera68

https://bloguers.net/literatura/florifagia-ii-cuento-corto/

35 comentarios en “Florifagia II – Cuento Corto.

  1. Hola, Ana, has hecho bien en encajarlo en el VadeReto, pues es totalmente válido. Lástima que en su momento no tuviera lecturas, está muy bien. El poder de las flores que, sin embargo, es efímero como la vida misma…

    Un abrazo. 🤗

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    1. Gracias Merche, es que cuando lo publiqué apenas había «revivido» mi blog y pues no me conocía mucha gente ni había entrado aún a los retos etc. Gracias por leer y comentar, lo aprecio mucho.

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  2. Creaturas magicas, interesante porque las recetas eran sencillas comer tal o cual flor, lo cual nos deja bastante a la imaginacion para pensar las formas que adquiria la creatura. Que bueno que rescataras el relato que es adecuado a la ocasion.

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  3. Qué bien relato tenías para este reto, así, sin querer, resultó más que propicio. Nunca me deja de sorprender tu imaginación para la construcción de situaciones. Celebro que lo hayas republicado y me doy cuenta que debo entrar más a fondo a los blogs para encontrar escritos antes publicados que de otra forma, no vería. Qué bueno que en esta ocasión ocurrió así. Un abrazo Ana! 😘

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  4. Hola, Ana.

    Desde el primer momento, este relato me ha llenado de paz. No sé si por tu narración tan bonita y pausada, o por las recetas florales que siempre calman y reconfortan. La Jardinería es una afición muy placentera, lo comprobé el poco tiempo que pude disfrutarla, y su empleo en la cocina es muy ancestral. Sin embargo, tú siempre lo llevas al plano fantástico y, en este caso, con una maravillosa moraleja.

    En mi pueblo hay un dicho: «virgencita, virgencita, déjame como estoy». Creo recordar que viene de un chiste donde alguien, en silla de ruedas, no para de pedir cosas y terminar desfilando sin frenos por una cuesta. Cosas de aquí. 😅😂

    Me parece adecuado e interesante repescar «antiguos» relatos. El blog y nuestra forma de escribir evolucionan y siempre se merecen una nueva publicación. Yo me lo estoy pensando.

    La ilustración es impresionante y como carta de presentación del relato es estupenda. ¿Es original o creada por IA? Si es lo segundo, yo nunca consigo tanto realismo y belleza.

    Muchísimas gracias por este regalo en forma de fábula. Paso a leer el que recomiendas.

    Abrazo grande.

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    1. Hola José, gracias por tus palabras sobre mi relato, las aprecio mucho. La imagen es de IA, el truco es darle todos los detalles posibles, ninguno sobra. A veces pienso en los ilustradores humanos y me dan un poco de pena que estas cosas los desplacen, pero es que son una maravilla. Te mando abrazo de vuelta.

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    1. Así es Themis. Estamos en un mundo que nos impele a que seamos algo que no somos, a no estar a gusto con nosotros mismos. Al final, somos lo que somos y hay belleza en aceptarse. Te mando un abrazo.

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  5. Me gusta el mensaje de que debemos aceptarnos tal como somos por fuera y también de cómo podemos mejorar por dentro. Transmites una atmósfera de sosiego donde se pueden captar los aromas que tan dulcemente describes.

    Tu relato está tan bien desgranado que me quedo con ganas de leer más. Es lo que me pasa también con mis propios relatos, que cuando empiezo a construir una historia, a medida que la voy desarrollando quiero contar más sobre la misma y al final me quedan relatos largos, que en el mundo acelerado de hoy pueden resultar excesivos.

    Disculpa por mi osadía en la comparación que puede parecer egocéntrica pero de ningún modo es esa mi intención como podrás imaginar.

    Bueno, me quedo un poco como la protagonista de tu cuento, aceptándome como soy.

    Gracias por compartir tan buen contenido.

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    1. Hola Marcos, síii, te entiendo perfecto. A menudo tengo yo que hacer una «poda» de mis relatos. He constatado que mientras más largos los hagas menos gente los lee, es la verdad jajaja. A veces sirve hacer «secuelas» del mismo relato del que se te quedaron aun cosas por contar. Gracias por tu lectura y comentario. Saludos.

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  6. Me gusta tu cuento, es mágico, si bien es cierto que hay muchas flores comestibles en tu cuento transmiten mágicamente belleza física, pero sin dudas no han podido transmitir belleza de alma a esta mujer que al final termina por destruir su jardín al ingerir malas hierbas y padecerlas.

    Es muy linda historia.

    Un abrazo.

    PATRICIA F.

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  7. Hola Ana

    Todo el uso de plantas y flores en la gastronomía puede parecer actualmente una novedad y se colocan sobre los platos con un fin estético solamente, sin tener en cuenta que nuestros antepasados utilizaban a la naturaleza como un elemento fundamental en los placeres gastronómicos y en la cura de numerosos males o el envenenamiento (que de eso también se hacía uso). ¡¡Y nos creemos tan sabios y avanzados! ¡Ja ja ja!!

    Me gustó mucho tu imagen. Yo me estoy peleando con Dream by Wombo. A veces muy bien y otras decepcionante. A pesar de esmerarme con las descripciones, no siempre logro lo que quiero. Tú ¿cuál usas?

    Gracias por tu magia. Un abrazo.

    Marlen

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    1. Gracias por comentar, Marlen. Respecto a las imágenes, me ha funcionado el generador de imágenes de Microsoft Designer. Te dan ciertos «créditos» y cuando te los acabas tarda un mundo de tiempo en generarse la imagen pero me gusta cómo quedan al final.

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  8. Una narración al estilo de los cuentos de hadas de siempre que me ha gustado muchísimo, al igual que ese derroche de imaginación en torno a la singular magia encerrada en las flores.
    Enhorabuena, Ana y muchas gracias por compartirlo.
    Un abrazo.

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